Nuestras manoplas están forradas con 100% pura piel de zarigüeya de Nueva Zelanda. ¿Por qué zarigüeya? En Nueva Zelanda la zarigüeya se considera una plaga porque no existe depredación natural y la creciente población de zarigüeyas se está abriendo camino a mordiscos a través de la flora y la fauna disponibles. El pelaje de la zarigüeya se compone de hebras de pelo muy finas y suaves, cada una de ellas hueca, que atrapan el aire y proporcionan un excelente aislamiento. Este es un atributo que la zarigüeya comparte con el oso polar. Los osos polares no sienten el frío y usted tampoco, con nuestras manoplas forradas de zarigüeya.